
Comunicar para desestigmatizar: relatos araucanos en tiempos de reconciliación y paz
- On 23 de noviembre de 2018
“Construir reconciliación también pasa por reconstruirse y pensar cómo superar todas esas marcas que dejó el conflicto en el pasado. Algunos sin mirar toda la historia estigmatizan a la población y dicen cosas como: “Toda Arauca es guerrillera””
Socorro Ramírez
Por: Área de comunicaciones Comisión de Conciliación Nacional
Arauca, 16 de noviembre 2018. – Durante los más de 55 años que ha durado el conflicto armado en Colombia comunidades enteras han sufrido el flagelo de la estigmatización por parte grupos armados ilegales y población en general, siendo categorizados de pertenecer a un grupo o al otro, o sus territorios vistos exclusivamente como escenarios de ilegalidad, violencia y tragedia. Afirmaciones que no solo son falsas, sino también peligrosas porque ponen en riesgo la vida y seguridad de sus habitantes, dañan la imagen de las regiones, obstaculizan su desarrollo y facilitan que grupos ilegales justifiquen su actuación.
El departamento de Arauca, conformado por 7 municipios, 26 resguardos y cerca de 6.800 afrocolombianos, en áreas rurales de Arauquita, Tame, Saravena y en el área urbana de Arauca capital, ha sido una de las regiones del país más afectadas por el conflicto armado. Aunque se han logrado algunas treguas, desde finales de los años 70 FARC y ELN han hecho presencia en ese territorio y se han enfrentado por su dominio, produciendo graves afectaciones a la población civil.
Revisar el pasado para comprender lo que sucede hoy en la región y saber cómo y qué contarle al resto del país y al mundo sobre ella, fue precisamente una de las ideas centrales de la primera parte del Taller Regional de Comunicadores para la Reconciliación y la Paz que llevó a cabo la Iglesia Católica a través de la Comisión de Conciliación Nacional (CCN) y la Pastoral Social de la Diócesis de Arauca los días 15 y 16 de noviembre en la ciudad de Arauca. Espacio en el que la invitada especial fue la Dra. Socorro Ramírez, profesora de la Universidad Nacional, politóloga, columnista, miembro de la CCN y de la mesa de diálogos entre el Gobierno y el ELN durante el más reciente ciclo de negociaciones.
Para dar inicio al taller, la profesora Socorro abordó entonces su charla de contexto desde cinco dimensiones específicas, propias de la región: colonización, conflicto armado, petróleo, política, relación con Venezuela. El profundo interés de los asistentes al taller sobre estos temas, demostrado a través su alta participación y sus comentarios sobre la importancia del espacio para recordar su historia e identidad.
Durante esta actividad pedagógica, a la que asistieron líderes comunitarios, campesinos, representantes de asociaciones y periodistas provenientes de otras localidades como Saravena y Puerto Jordán, se abordaron también, bajo metodologías teórica prácticas, temas como: herramientas básicas del periodismo, claves para comunicar la reconciliación y la paz y principios de la narrativa audiovisual.
Hacer inventarios de los aspectos valiosos de la región, así como de aquellas historias de paz y reconciliación que se escriben en las distintas comunidades para contárselas al resto del país, fue una de las invitaciones centrales hechas por los talleristas, todos vinculados a la Comisión de Conciliación. Entre las actividades prácticas, uno de los ejercicios más destacados se dio cuando la comunicadora Lida Losada pidió a los asistentes que, por grupos, construyeran textos de tipo periodístico que narraran aspectos relacionados con la gente, el territorio, las iniciativas comunitarias y el potencial de la región.
Los escritos desarrollados se convirtieron en la base del trabajo práctico que se realizó el segundo día del taller, en el que los participantes, con la ayuda de Mauricio Herrera, Damian Raiser y Lida Losada, comunicadores de la CCN, elaboraron piezas de comunicación para ser difundidas a través de televisión, radio y dispositivos móviles. Productos que cuentan múltiples virtudes de un departamento que ha sufrido pero que se supera; con tierras ricas que producen el mejor cacao del mundo; con personas resilientes que están dispuesta a sobreponerse a las adversidades y ayudar a otros a hacerlo; con historias de reconciliación y construcción de memoria histórica y social que merecen ser contadas; con una enorme capacidad asociativa que les ha permitido organizarse y trabajar unidos desde distintos sectores.
Insistir en que la reconciliación va mucho más allá de conseguir el perdón y que la paz trasciende la firma de acuerdos y el silencio de los fusiles, que en todos los casos se trata de una responsabilidad colectiva, de una construcción diaria y de un proceso de largo aliento; que los periodistas y medios de comunicación tienen una responsabilidad determinante en este terreno y que debe empezarse por desarmar la mente, el corazón y el lenguaje, informar a la luz de la verdad y permitir que tanto víctimas como victimarios sean protagonistas de las historias, hicieron parte de los propósitos centrales de las charlas realizadas durante esta actividad.
Este taller de comunicaciones, posible gracias al apoyo solidario de la Fundación Konrad Adenauer Stiftung, se convirtió en una oportunidad para alentar a los araucanos en el uso de la comunicación como una herramienta clave para crear y multiplicar mensajes que alienten en las comunidades en la construcción de reconciliación y paz territorial.