06. Mandala: recordación de las víctimas de la masacre de La Chinita

OBSERVATORIO - CASOS - DIÓSESIS DE APARTADÓ

Lugar: Barrio Obrero, Apartadó.
Modalidad: Memoria histórica.
Tipo: Antropológica y Estructural
Autores: Diócesis de Apartadó
Participantes: Familias de las víctimas, Comisión de la Verdad e Iglesia católica
Otros: Feligreses en general de Apartadó
Objetivo: En el marco de la Semana por la Vida y por la Paz, septiembre de 2020, recordar a las víctimas de la masacre de La Chinita
Timeline: Antes, durante y después de la desmovilización de las AUC
Duración 2 dias
Descripción de la experiencia

La masacre de La Chinita del 23 de enero de 1994, por parte de las Farc-EP (V Frente), que ultimó a 35 líderes de Esperanza, Paz y Libertad, fundación creada por excombatientes del Ejército Popular de Liberación (EPL) como parte de lo acordado para su reintegración a la vida civil, fue el triste escenario que dio vida a la Fundación Diocesana Compartir; así, el 14 de febrero de 1994, en cabeza de monseñor Isaías Duarte Cansino se creó el Centro de Atención y Apoyo para las Viudas y Huérfanos de la Violencia (Compartir), en cabeza de la hermana Carolina Agudelo, miembro de la Comunidad de Hermanas de la Caridad Dominicas de la Presentación, quien empezó la actividad cristiana de atender las necesidades más prioritarias: pan y techo provisional para las viudas, huérfanos y población desplazada de esta masacre; en síntesis, Compartir se convierte en Fundación en el año 1999, creándose sus Estatutos, y quedando como socios fundadores la Diócesis de Apartadó y la Comunidad de Hermanas Dominicas de la Presentación.

Se trata en términos generales, desde ese entonces, de atención integral para la zona aledaña donde ocurrió la masacre: el barrio Obrero, uno de los lugares más extensos de invasión en Latinoamérica, con grandes carencias estructurales que aún en el presente continúan; de tal modo, la Diócesis de Apartadó ha sido proveedora de alimentos, vivienda, proyectos educativos y productivos desde una clara necesidad espiritual de sus habitantes; hoy en día, la Fundación está presente en 11 localidades de la región: Mutatá, Chigorodó, Carepa, Apartadó, Nueva Colonia, Currulao, Turbo, Necoclí, San Pedro de Urabá, Arboletes (Antioquia) y Riosucio (Chocó).

La Fundación cuenta con siete Programas de atención: Programa de salud mental (a través de sus componentes psicosocial, promoción y seguimiento), Hogar día (cuenta con nueve hogares que trabajan salud mental, educación, organización, nutrición y ambiente), Formación para el empleo (capacitación técnica y fortalecimiento organizacional), Tardes del compartir (para fortalecer la organización comunitaria, participación, empoderamiento de la mujer, fomentar la fe y el sentido de la vida), Hogar infantil (para niños menores de cinco años se trabajan los componentes de organización, pedagogía, desarrollo psicosocial, salud y nutrición, ambientes educativos, de protección y talento humano (mil doscientos niños/as atendidas), Padrinos (es una red de apoyo para asistir en aulas educativas, alimento, vestido, acompañamiento psicosocial, recreación y auxilio escolar (180 niños se atienden en la actualidad) y Hogar digno (solución de vivienda para 363 familias); finalmente, es de resaltar el proyecto rentable PASABAN consistente en la elaboración de productos comestibles derivados del banano.

La hermana Carolina (protagonista de este caso), señaló en referencia a las mujeres/viudas que atienden: “Compartir las atiende a partir del mensaje cristiano, del afianzamiento de la fe porque esto no se vive sino es con una profunda fe, y han sido mujeres que, además de su resiliencia, han aprendido a esperar al señor, hacer la voluntad del señor y han aprendido a luchar la vida con sus familias”; para reconstruir el tejido social que ha sido el mayor damnificado en toda esta zona del Urabá antioqueño y chocoano; todo esto quiere decir que, solo a partir de la combinación reconstrucción del tejido social y espiritualidad, es posible continuar el plan de vida que se ha visto amenazado por las diferentes olas de violencia.

Resultado
Atención psicosocial, alimento, vivienda y proyectos productivos para las viudas, huérfanos, población desplazada y comunidad, en general, de esta zona del Urabá antioqueño y chocoano.